El Real Betis Balompié logra una victoria contundente y dominante sobre el Atlético de Madrid. Jornada inolvidable en la que los jugadores del Betis, tras la amargura de quedar eliminados en Europa, demuestran su máximo potencial.
El primer tiempo fue excelente: los verdiblancos controlaron por completo el juego.
En lo que va de temporada, los primeros 45 minutos fueron definitivamente los más destacados del Betis. Los verdiblancos dominaron claramente en todas las áreas del campo, mostrando una superioridad indiscutible. Desde el inicio, el equipo demostró una efectiva coordinación en el ataque que resultó en resultados positivos en poco tiempo. La acción inicial finalizó con un gol en su propia portería anotado por José María Giménez, debido a la intensa presión de un Abde agresivo. Tras ponerse en ventaja con un gol, el Betis demostró una fuerte determinación por obtener la victoria y se lanzó con agresividad en busca de aumentar su ventaja, mostrando una actitud implacable hacia su oponente.
El equipo de Betis continuó creando ocasiones de gol. Abde desperdició dos oportunidades claras: en primer lugar, un mano a mano con Oblak que no logró concretar, y luego un fuerte disparo desde la distancia que impactó en el travesaño. Vitor Roque y Chimy Ávila también tuvieron oportunidades gracias a los constantes centros, pero no lograron rematar con precisión.
Durante la primera mitad, el Atlético tuvo pocas oportunidades de generar peligro, solo lograron crear una ocasión a balón parado que fue bien defendida por Rui Silva. La superioridad del Betis era tan clara que el marcador de 1-0 parecía no reflejar adecuadamente el esfuerzo realizado, pareciendo incluso injusto.
El Atlético mostró una fuerte reacción y el Betis resistió en la segunda parte.
Después de la pausa, el Atlético de Madrid trató de responder, demostrando un aumento en la intensidad de su juego. A pesar de que el Betis siguió presionando y tratando de aumentar su ventaja, los jugadores de Simeone se empezaron a acercar con peligro al área. Rui Silva tuvo una destacada actuación al detener un potente disparo de Julián Álvarez que habría empatado el partido.
El Betis siguió intentándolo una y otra vez. En una acción de Fornals que terminó estrellándose en el travesaño, el Betis llegó a ganar un penalti que finalmente fue invalidado por el VAR. A pesar de los múltiples intentos, Oblak mantuvo su portería invicta y impidió que el Betis aumentara su ventaja.
Los momentos de tensión se hicieron presentes y el desenlace fue angustiante.
El Betis tuvo que aguantar en los momentos finales debido al cansancio físico acumulado. El Atlético de Madrid golpeó el poste dos veces y estuvo a punto de empatar el partido en varias ocasiones.
En el minuto 88, Vitor Roque anotó un gol que parecía definitivo, pero fue invalidado por fuera de juego. El Betis estaba luchando por marcar el segundo gol, a pesar de haber demostrado un rendimiento superior en todos los aspectos del partido.
El Villamarín se siente orgulloso tras obtener una victoria merecida.
Por último, el Betis consiguió mantener la ventaja gracias a su dedicación y esfuerzo, garantizando tres puntos fundamentales para su objetivo de llegar a competiciones europeas. La afición expresó su gratitud con una ovación emocionada hacia el Betis, reconociendo su valentía y entrega en el campo. El equipo se presentó como un conjunto sólido, firme y cohesionado.